Por Tim Reynolds. Associated Press
Oklahoma City.- Comenzó con 30 equipos, la mayoría de ellos bastante optimistas sobre sus posibilidades cuando la temporada comenzó hace ocho meses, 1.320 juegos, 35.543 triples y 299.608 puntos.
Solo quedan dos equipos. Para un juego. Juego 7.
La temporada de la NBA termina la noche del domingo cuando los Pacers de Indiana visiten al Thunder de Oklahoma City para decidir qué equipo levantará el Trofeo Larry O’Brien, tomará el relevo de los Celtics de Boston como campeones y se convertirá en el séptimo ganador diferente del título de la liga en los últimos siete años. Es el primer juego de todo o nada en la NBA desde 2016, cuando Cleveland venció a Golden State.
“Estoy muy ansioso por el Juego 7. La última vez que tuvimos uno de estos en las finales, creo que fue en el ’16. Estos son momentos especiales ciertamente para ambos equipos, pero para nuestra liga, para el juego, para el interés mundial en el juego. Es un momento para celebrar”, dijo el entrenador de los Pacers, Rick Carlisle.
Sí, pero solo un equipo celebrará la noche del domingo.
Para los Pacers, sería el primer título de la NBA y el colofón a una temporada que comenzó con Indiana golpeada y comenzando con un récord de 10-15 en los primeros 25 juegos. Ningún equipo ha estado por debajo de .500 tan avanzado en una temporada y ha ganado un campeonato.
Para el Thunder, sería el primer título de la NBA —en cierto modo, Seattle ganó uno en 1979 y aunque la franquicia se mudó a Oklahoma City desde allí, el Thunder no lo reconocen como propio— y culminaría una temporada en la que el equipo anotó más puntos que cualquier otro club en la historia de la NBA y registró el mejor récord.
“Tenemos que entender que el trabajo está hecho y tenemos que confiar en el trabajo. El músculo está construido. Tenemos que flexionar ese músculo. De eso se tratará mañana para nosotros”, dijo el entrenador de Oklahoma City, Mark Daigneault el sábado, en el último día de práctica de la temporada.
Ha sido la esencia de una serie de ida y vuelta, con ambos equipos teniendo la ventaja en algún momento. Indiana lideró 1-0 y 2-1; Oklahoma City lideró 3-2 pero fue aplastado en el Juego 6, su primera oportunidad de ganar el título.
Así que aquí estamos, empatados 3-3, a un juego de una decisión.
“Agradecido por la oportunidad. Eso es algo que puedo decir es que a lo largo de todo esto, siempre tienes que permanecer agradecido por donde estás porque hay muchos jugadores de la NBA que cambiarían su lugar conmigo ahora mismo. Así es como lo veo. Pero en cuanto a la historia, quiero estar en el lado bueno de eso, seguro”, añadió el guardia del Thunder, Jalen Williams.
Oklahoma City ha parecido cada parte de un contendiente al campeonato todo el año; con un récord de 68-14 en la temporada regular, el Thunder se consolidaron en el papel de favoritos. Ser el mejor equipo en la temporada regular es para este privilegio, ser anfitrión del Juego 7.
Los Pacers alcanzaron su punto máximo en el momento adecuado y tomaron la ruta más tortuosa hasta aquí. Pero ya comenzaron esta serie con una victoria en Oklahoma City. No ven razón por la cual no pueda terminar de la misma manera.
“Creo que simplemente hemos hecho un gran trabajo manteniéndonos juntos. No hay un grupo de chicos con los que preferiría ir a la guerra. Estoy realmente emocionado de competir con estos chicos en un Juego 7, y va a ser muy divertido”, dijo el guardia de los Pacers, Tyrese Haliburton
La salud de Haliburton
La distensión en la pantorrilla derecha sigue siendo un problema para Haliburton, pero jugó en el Juego 6 con la lesión y, sin sorpresa, va a jugar en el Juego 7.
“Estoy prácticamente en el mismo punto que antes del Juego 6. Un poco adolorido. Lo bueno es que solo tuve que jugar como 23 minutos. He podido recibir aún más tratamiento y hacer más cosas. Solo trato de cuidarlo lo mejor que puedo. Pero estaré listo para el Juego 7”, acotó Haliburton.
El Thunder en tiros
Contando todos los juegos de esta temporada, las dos salidas de menor puntuación de Oklahoma City fueron 81 puntos contra Milwaukee y 91 puntos contra Indiana.
El juego contra los Bucks fue en la final de la Copa NBA.
El juego contra los Pacers fue el Juego 6, cuando OKC tuvo la oportunidad de ganar el título de la NBA.
Entonces, en los dos juegos “de campeonato” que el Thunder han jugado esta temporada, están promediando 86 puntos. En todos los demás juegos, están promediando 119.7 puntos.
“Obviamente tenemos que mejorar ofensivamente. El último juego, claramente, no fue lo suficientemente bueno y no va a ser suficiente, y lo sabemos. Vemos videos para ese tipo de cosas. Tienes juegos así. Ahora, apesta tenerlo en esa etapa obviamente, pero sabemos que tenemos que ser mejores, seguro”, señaló el guardia de los Thunder y MVP de la NBA, Shai Gilgeous-Alexander. AP
