La neuróloga Anyeri De Peña explicó este miércoles en «El Matutino de la 91» que los primeros signos del Alzheimer suelen ser muy sutiles, por lo que muchas personas no toman las medidas adecuadas a tiempo. Es crucial diferenciar estos signos de los cambios normales relacionados con la edad y buscar una evaluación profesional si se experimentan estos síntomas.
Señales de alerta que suelen ser sutiles
Pérdida de memoria: Dificultad para recordar información reciente, conversaciones o eventos.
Problemas de lenguaje: Dificultad para encontrar la palabra correcta o para seguir una conversación.
Dificultades para planificar y resolver problemas: Problemas para seguir instrucciones, planificar actividades cotidianas o tomar decisiones.
Desorientación: Perderse en lugares conocidos o confundirse con el paso del tiempo.
Cambios en el juicio: Disminución de la capacidad de juicio, como la dificultad para gestionar el dinero.
Dificultades visuales: Problemas para interpretar distancias o percibir el espacio.
Cambios en el estado de ánimo o personalidad: Actuar con más agresividad, paranoia o aislamiento social.
Pérdida de interés: Desinterés en actividades que antes disfrutaba o dificultad para realizarlas.
Diferencia entre síntomas de Alzheimer y cambios por la edad
Es importante no confundir estos síntomas con los cambios normales que ocurren con el envejecimiento. Por ejemplo, cometer un error de vez en cuando o tener una mala decisión ocasional no significa que sea Alzheimer; sin embargo, si se presentan varios de estos síntomas de forma persistente, es necesario consultar a un profesional.
¿Qué hacer si detectas estos síntomas?
Si notas alguno de estos signos en ti o en un ser querido, consulta a un neurólogo o profesional de la salud. Un diagnóstico temprano permite un mejor manejo y planificación del futuro de la persona afectada.
De Peña recordó que la actividad física y la socialización son protectores clave del cerebro. “El principal protector de nuestro cerebro, yo no me canso de decirlo, es la actividad física”, afirmó, al cuestionar la falta de espacios adecuados para el envejecimiento activo en el país.
Señaló que la prevención debe comenzar desde etapas tempranas de la vida y no limitarse a la tercera edad. Recomendó mantener hábitos saludables, promover centros de atención y crear entornos que permitan al adulto mayor continuar con actividades cognitivas, sociales y culturales para retrasar el deterioro.



