BOGOTÁ (AP) — El presidente colombiano Gustavo Petro firmó un decreto el miércoles con el que convoca a los ciudadanos a participar en una consulta popular sobre cambios al sistema laboral, desconociendo la negativa que dio el Senado sobre su conveniencia.
La consulta popular contiene 12 preguntas sobre cambios al sistema laboral como la disminución de la jornada diurna a ocho horas y su culminación a las 6:00 de la tarde, el pago del 100% de recargos dominicales y privilegia la estabilidad laboral mediante contratos a término indefinido.
La votación fue convocada para el 7 de agosto, cuando se cumple el tercer año de mandato de Petro, el primer izquierdista en gobernar Colombia.
Se trata de una decisión polémica que ha generado en días recientes el rechazo de nueve partidos políticos, la mayoría de oposición, así como de juristas que consideran que el presidente está pasando por encima del Poder Legislativo.
El Senado negó la consulta popular de iniciativa gubernamental el 14 de mayo. Sin embargo, Petro consideró que la cámara alta “no aprobó ni reprobó” la solicitud que hizo para que se realizara una consulta popular y que, en cambio, durante la votación hubo un “fraude” y errores técnicos que la invalidarían.
Petro firmó el decreto coincidiendo con las manifestaciones de las centrales obreras en las principales ciudades de Colombia que respaldaban la consulta popular, en medio de un tenso ambiente político y de orden público en el país tras el atentado contra el senador opositor y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien fue baleado en un mitin político el sábado y se encuentra en estado crítico.
Tras el ataque, el Congreso ha trabajado de forma atípica: la Cámara de Representantes suspendió las sesiones durante la semana y el Senado hizo homenajes públicos.
Petro impulsa una consulta popular desde que el Congreso negó por segunda vez su reforma laboral en marzo con el argumento de que usar el mecanismo de participación ciudadana le daría voz directa al pueblo, al tiempo que tildó al Legislativo de ejercer un “bloqueo” a sus iniciativas.
La reforma laboral que fue negada en marzo revivió en mayo por decisión del mismo Congreso, tras una apelación de su decisión. Actualmente cursa su último debate, pero ya no cuenta con el respaldo pleno del gobierno ni de los sindicatos que argumentan que se convirtió en una “contrarreforma” al cambiar aspectos sustanciales.
“He firmado el decreto que convoca a la consulta popular”, anunció Petro desde X, antes Twitter.
El mandatario agregó que derogaría el decreto en caso de que el Congreso apruebe una reforma laboral que incluya los cambios que propone en la consulta popular: “Solo se derogará antes de las urnas si los puntos que se le preguntan al pueblo para que exprese su orden constituyente, sean respondidos positivamente por el Congreso, poder constituido legítimo para discutir leyes”.
Se espera que la convocatoria por decreto de la consulta popular será demandada ante altos tribunales por sectores de oposición para intentar dejarla sin efecto. En paralelo, el Consejo de Estado estudia una demanda que pide anular la votación en el Senado.
Anticipándose a las demandas, Petro aseguró que enviarán el decreto que convoca a la consulta a la Corte Constitucional para su revisión.
La consulta popular que decretó Petro deberá obtener el voto afirmativo de la mitad más uno de los sufragios válidos y una participación de al menos la tercera parte del censo electoral que corresponden a más de 13 millones de votos, más de los que obtuvo el mandatario al conquistar la Presidencia en 2022.
Se espera que el presidente Petro acompañe las manifestaciones a favor de la consulta popular en Cali, en el suroeste del país, a donde arribó en la tarde del miércoles.
El mandatario acudió primero a un consejo de seguridad en Cali tras múltiples ataques con explosivos y armas de fuego perpetrados el martes en esa región. Las autoridades los han atribuido a la facción liderada por alias “Iván Mordisco” de las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). AP
