El propietario de Twitter, Elon Musk, este sábado reconoció que la red social sigue siendo deficitaria, principalmente a causa de los bajos ingresos publicitarios y la pesada carga de deuda.
«Seguimos teniendo un flujo de caja negativo, debido a la caída de alrededor del 50 % de los ingresos publicitarios y a la pesada carga de la deuda. Necesitamos alcanzar un flujo de caja positivo antes de permitirnos el lujo de alguna otra cosa», escribió el multimillonario respondiendo a las propuestas de una usuaria sobre el futuro de la red social. Varios de los principales anunciantes de Twitter pusieron fin a su cooperación con la plataforma desde que Musk adquirió la empresa.
Musk compró Twitter en octubre de 2022 por 44.000 millones de dólares, se posicionó como director ejecutivo y realizó una serie de cambios en la empresa.
Después de la compra de Twitter por Musk, la compañía perdió una gran cantidad de ingresos. El pasado diciembre el empresario anunció que, antes de varias rondas de recortes de gastos, la situación de Twitter era comparable con la de un avión a punto de estrellarse, debido a que la empresa enfrentaba un flujo de caja negativo de 3.000 millones de dólares.
Como consecuencia, el empresario está tratando de reducir costes, recortando el 80 % de la plantilla de la red social, vendiendo mobiliario de oficina de Twitter e introduciendo varias funciones de pago.
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