Por: Stephen Groves
WASHINGTON (AP) — Los republicanos del Senado enfrentan el miércoles presión del presidente Donald Trump para oponerse a una resolución demócrata que anularía la emergencia presidencial sobre el fentanilo que está utilizando para implementar aranceles en Canadá.
Apenas horas antes de que Trump anunciara su plan de «aranceles recíprocos» contra China, México y Canadá —su llamado «Día de la Liberación» —, se esperaba que el Senado votara una resolución que ofrece a los republicanos una vía de escape a los impuestos a las importaciones de Canadá. Esta es una prueba significativa para la lealtad republicana a la visión de Trump de reconstruir la economía estadounidense mediante la restricción del libre comercio. Muchos economistas advierten que el plan podría provocar una contracción económica, y los senadores republicanos ya observan con inquietud.
Los votos de al menos cuatro republicanos —los senadores Lisa Murkowski de Alaska, Susan Collins de Maine, Mitch McConnell de Kentucky y Rand Paul de Kentucky— estaban en duda antes de la votación. Si todos los demócratas más los cuatro republicanos votan a favor de la resolución, alcanzaría la mayoría simple necesaria para su aprobación en el Senado. La legislación aún tendría que ser presentada y aprobada en la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos.
En una publicación en redes sociales justo antes de la 1 a. m. del miércoles, Trump destacó a los cuatro senadores y dijo que «con suerte, se sumarán al movimiento republicano, para variar, y lucharán contra la presión salvaje y flagrante de los demócratas para no penalizar a Canadá por la venta, a nuestro país, de grandes cantidades de fentanilo».
Para justificar los aranceles, Trump ha argumentado que Canadá no está haciendo lo suficiente para impedir la entrada de drogas ilegales por la frontera norte. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) incautó 20 kilos de fentanilo en la frontera norte durante el año fiscal 2024, y desde enero, las autoridades han incautado menos de 680 kilos, según datos federales . Mientras tanto, en la frontera sur, las autoridades incautaron más de 9500 kilos el año pasado.
El senador Tim Kaine, el demócrata de Virginia que inició la resolución, dijo en una conferencia de prensa el martes que Trump estaba inventando una «emergencia inventada» para ayudar a pagar la extensión de los recortes de impuestos que, según él, beneficiarían principalmente a los ricos.
«¿Cómo van a pagarlo? Recortes masivos en programas como Medicaid y Medicare, y aranceles impuestos a costa del ciudadano común», dijo Kaine.
Los demócratas destacaron cómo los aranceles a Canadá podrían encarecer la construcción de viviendas, perturbar industrias como la construcción naval y la elaboración de cerveza y aumentar los precios de los productos comestibles importados.
“Hoy, Donald Trump asesta un duro golpe a la economía estadounidense e incluso al sueño americano”, declaró el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, en un discurso ante el pleno. Añadió: “El Senado tiene la oportunidad de frenar esta guerra comercial hoy si los republicanos se unen a nosotros”.
Por su parte, los líderes republicanos estaban tratando de mantener a sus miembros a raya contra la resolución arancelaria enfatizando que Trump estaba actuando para abordar el tráfico de fentanilo y la seguridad fronteriza.
El senador John Barrasso, líder de la mayoría, afirmó en un discurso en el pleno que el expresidente Joe Biden también había «abrido la frontera norte. Los cárteles criminales se dieron cuenta y se aprovecharon».
“Existen amenazas únicas para Estados Unidos en nuestra frontera norte”, declaró el senador de Wyoming. “El presidente Trump está tomando las medidas audaces, decisivas y rápidas necesarias para asegurar también esa frontera”.
Sin embargo, un grupo clave de republicanos del Senado está preocupado por el impacto económico de los aranceles en Canadá. Collins señaló que Canadá ya está reforzando su seguridad fronteriza para combatir el narcotráfico y expresó su preocupación por las consecuencias que los aranceles tendrían para las empresas y los hogares de Maine.
Tenemos una fábrica de papel en el norte de Maine que obtiene su pulpa de Canadá. La bombean a través del río y luego la convierten en papel. Esa fábrica emplea a 510 personas. Tendrá problemas si se aplica un arancel del 25% a la pulpa, dijo Collins.
Aun así, otros republicanos expresaron su preocupación por el impacto de los aranceles sobre los agricultores y otras industrias, pero aún así querían darle a Trump espacio para negociar mejores acuerdos comerciales.
El senador de Dakota del Norte, Kevin Cramer, afirmó haber mantenido conversaciones constantes con funcionarios canadienses y empresas de su estado, como Bobcat, que realiza una parte significativa de sus ventas en Canadá. Sin embargo, no tenía previsto apoyar la resolución. En cambio, esperaba que el anuncio de Trump del miércoles fuera solo un punto de partida para las negociaciones para la eliminación recíproca de los aranceles.
El republicano añadió: “No me preocupa demasiado, pero obviamente ocupa mucha atención y tiempo y genera mucha ansiedad política”.
