Santo Domingo, República Dominicana.
El movimiento cívico Participación Ciudadana, capítulo nacional de Transparencia Internacional, expresa su firme rechazo al artículo 27 del proyecto de modificación de la Ley Electoral aprobado el pasado viernes 23 por el Senado de la República. Se trata de una maniobra para inutilizar a la JCE, sometiéndola a una supervisión institucionalizada y permanente de los partidos políticos, sobre todas las decisiones y planes del órgano electoral, en violación a las facultades que le otorga el Artículo 212 de la Constitución de la República.
Esta propuesta debe ser rechazada rotundamente por todos los sectores que abogan por el avance electoral y democrático en el país. De aprobarse lo propuesto por los senadores, los partidos políticos se convertirían en una especie de junta de directores que mensualmente, en los años electorales y cuatrimestralmente en los no electorales, supervisaría y tendría facultad para aprobar o rechazar, es decir, aplicaría censura previa a las decisiones del órgano responsable de la organización de las elecciones. Más aún, de acuerdo con la propuesta de los senadores, no sólo el pleno de la JCE estaría bajo la supervisión de los partidos, sino también las direcciones de elecciones, informática y voto en el exterior.
Es realmente asombroso que los senadores pretendan que los partidos pasen a dirigir y supervisar los asuntos electorales, asegurándose de que solo pase lo que les conviene y de bloquear todo lo que los somete al orden. Adicionalmente, para debilitar más a la JCE, se eliminaría la facultad que tiene de dictar medidas cautelares, con lo cual se la ata de manos en su capacidad de actuar con presteza y evitar violaciones a la Ley.
Participación Ciudadana expresa su decepción y desacuerdo con la propuesta aprobada por el Senado, con varios meses de retraso. Reclama al Partido Revolucionario Moderno, con mayoría en el Senado, así como a los partidos de oposición, honrar los compromisos asumidos con la sociedad dominicana en el orden de mejorar el régimen y la cultura electoral. Las propuestas de modificaciones al régimen electoral y de partidos se están discutiendo para avanzar hacia una democracia más desarrollada. En tal sentido, es inaceptable que el proyecto aprobado en el Senado deje de lado avances contenidos en la propuesta de modificación entregada por la JCE y que cuentan con amplio apoyo de la ciudadanía, tan importantes como los siguientes:
Reducción de los topes de los gastos de campaña por partido y por candidatura. Los topes de gastos establecidos en la ley actual son muy altos, lo que da como resultado un proceso electoral extremadamente costoso, factor que ha sido relacionado con la corrupción y la penetración de dinero ilícito. La propuesta de la JCE plantea una escala de gastos más razonable y acorde con la economía del país. Naturalmente esta propuesta fue ignorada por los senadores.
Reducción de los topes de las contribuciones individuales. Las contribuciones individuales que pueden recibir los candidatos son muy altas, con lo cual, muchas de ellas adquieren el carácter de eventuales hipotecas del patrimonio público y penetración de dinero ilícito. El país daría un gran paso adelante disminuyendo esos altos montos que superan los establecidos en naciones ricas.
Obligación de los candidatos de presentar informes de gastos. En nuestro país, la mayoría de las contribuciones son recibidas individualmente por los candidatos, sin obligación de dar cuenta de las mismas, ya que la Ley actual solo pide informes de los partidos y organizaciones políticas. Junto a las dos propuestas anteriores, los informes individuales conformarían un conjunto de medidas dirigidas a reducir la entrada de dinero ilícito, la inequidad, la corrupción y la impunidad.
Avances y garantías en la paridad de género horizontal y vertical en las listas de candidatos y candidatas. El Senado desechó la propuesta presentada por la JCE que permite una mayor garantía de respeto al derecho de las mujeres y a la ruptura de la discriminación.
Fórmula de repartición de escaños más democrática. Este fue otro paso de avance dejado de lado por los senadores. En especial, el país necesita mejorar la distribución de los escaños para diputaciones, ya que la actual se ha prestado para injusticias y conflictos.
Sanciones a la violación de los topes y el incumplimiento a la presentación de informes. Al dejar estas violaciones fuera de los delitos electorales, el Senado no contribuye a que se avance en este sentido, ya que no implican consecuencias.
En diversas ocasiones en estos dos últimos años, Participación Ciudadana ha establecido sus aspiraciones y propuestas de cambios en las leyes electorales. Apoyamos el proyecto de la JCE; participamos en el diálogo al interior del CES; visitamos a los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados en búsqueda de un acuerdo para avanzar y recibimos promesas de que sería satisfecho el reclamo nacional de mejorar nuestro régimen electoral y de partidos.
Participación Ciudadana solicita a la Cámara de Diputados corregir los graves errores y omisiones en el proyecto de modificación del régimen electoral. Las pasadas elecciones mostraron serias deficiencias en esta Ley y en la de partidos políticos. Es necesario que sean reformadas cuanto antes, con tiempo para ser aplicadas en el próximo proceso electoral, pero esa reforma debe ser para avanzar. En especial, llamamos la atención del presidente de la República, Luis Abinader y del liderazgo político para que conviertan en realidad sus promesas y pretensiones de contribuir a la democracia y el fortalecimiento institucional de la República Dominicana.