¿Lo has notado? Los pilotos de Fórmula 1 tienen el cuello bastante grueso y musculoso, pero esto no es casual. La razón son las enormes fuerzas a las que está sometido su cuerpo durante una carrera, que incluye aceleraciones y frenadas bruscas y giros cerrados a altas velocidades.
Al entrenar su cuello los pilotos evitan los movimientos bruscos de sus cabezas durante la carrera previniendo daños cervicales que podrían llegar a ser graves. Si te preguntas cómo logran tener un cuello así, lo hacen ejercitando dicha parte de su cuerpo con rutinas específicas, tal como lo harías con cualquier parte de tu cuerpo.
Via Ciencias de bolsillo